Si de algo no hay duda es que Facebook Ads es una de las plataformas de publicidad más potentes del momento junto con las campañas de SEM en Adwords.
La publicidad en Facebook facilita la tarea de encontrar a tu público de un modo más correcto y segmentado, captar su atención para, de ese modo, obtener los resultados correctos. La misma plataforma advierte que en esta red social se mueven más de 1.800 millones de personas y 500 millones en su hermana pequeña Instagram.
El éxito de un buen anuncio en Facebook marca mucho el peso en la creación de textos de calidad, el uso de imágenes buenas – o vídeos- , así como el uso de un Call To Action que resalte con creces.
¿Cómo medir los resultados?
La misma plataforma te ofrece métricas en cada resultado de nuestros anuncios:
- CTR: hace referencia al número de clics que recibes entre el número total de impresiones del anuncio. Ojo, es importante entender que una impresión se contabiliza cada vez que un usuario ve el anuncio.
- Relevance Score o Puntuación de relevancia: es una opción que te da Facebook de pagar menos al llegar a tu audiencia. Cuando tu anuncio alcance las 500 impresiones, se te enseñará una puntuación de relevancia que se comportará de manera variable durante el proceso publicitario. La puntuación se mueve entre 1 y 10, basándose en los impactos positivos del anuncio (clics, likes, shares…), del mismo modo que los negativos (click en ocultar el anuncio, por ejemplo). Cuanto más alta sea la conversión del 1 al 10, mucho menos se pagará por la conversión.
Ahora bien, ¿cómo optimizar las campañas?
- La primera vez que publiques el anuncio hazlo en carrousel, es decir, no lances solo un tipo de anuncio, haz un test para poder ver e identificar qué tipo de anuncio gusta más a tu audiencia.
- Actualiza, edita y cambia las campañas. A pesar de que parezca que funcione , es importante editarlas y darle contenido nuevo y fresco: texto nuevo, fotos distintas, enlaces de destino diferentes…
- Segmenta con cabeza. Cuanto mayor sea el rango más posibilidad de llegar a un público irrelevante que no termine por convertir. Juego con una segmentación específica y mézclala con intereses que puedan tener tu target y audiencia futura.
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